¿Sabías que la clave para una sonrisa bonita y saludable está en tu plato? Y es que consumir las necesarias vitaminas para los dientes te ayudará a tener una dentadura fuerte, sana y resplandeciente.
Si bien un correcto cepillado de dientes y el uso de hilo dental a diario acompañado de un buen enjuague bucal es vital para mantener una boca saludable, lo cierto es que las vitaminas juegan también un papel crucial para disfrutar de dientes sanos y fuertes.
Y precisamente de eso vamos a hablar en el artículo de hoy, de cuáles son las mejores vitaminas para fortalecer los dientes y en que alimentos se pueden encontrar, para que puedas incorporarlas a tu dieta diaria. ¡Comenzamos!
Tabla de contenido
Conoce la importancia de las vitaminas para los dientes
Los dientes, como estructuras vivas que son, necesitan ciertos nutrientes esenciales para mantenerse fuertes y saludables.
Las vitaminas desempeñan un papel vital en este proceso, pues ayudan en la formación y reparación del esmalte dental, fortaleciendo así las piezas dentales y protegiéndolas contra el desgaste y la caries. Además, también contribuyen a otras funciones vitales para la salud de los dientes.
Las vitaminas esenciales para fortalecer los dientes incluyen la vitamina A, C y D, además de nutrientes como el calcio y el fósforo, entre otros. A continuación, hablaremos de cada uno de ellos en detalle.
Los 5 mejores nutrientes y vitaminas para fortalecer los dientes
Prepárate para conocer cuáles son las vitaminas más importantes para la salud bucal, sus funciones específicas y en qué alimentos puedes encontrarlas para obtenerlas de forma natural.
Vitamina D
Famosa por ser asimilada mediante la radiación solar, motivo por el que es conocida como la «vitamina del sol», la vitamina D es clave tanto para los dientes como para los huesos, pues favorece la absorción de fósforo y calcio.
La relación entre esta vitamina y los dientes tiene mucho que ver con el calcio y su absorción. Y en este sentido su importancia es doble.
Por un lado, al ayudar a absorber y depositar calcio, proporciona solidez y estructura a las piezas dentales y fortalece el esmalte, al tiempo que contribuye a la salud ósea que soporta los dientes.
Por otro lado, la vitamina D también contribuye a aumentar la densidad mineral del tejido dentario. Todo ello resulta en unos dientes más resistentes a roturas y a la aparición de caries y otras patologías dentales. Así lo demuestra una investigación de la Universidad de Valencia y un reciente estudio de varias universidades de China.
Fuentes de vitamina D: esta vitamina es posible obtenerla mediante la exposición segura al sol, que permite que la piel la absorba. La vitamina D también se encuentra de forma natural principalmente en el pescado azul (salmón, atún, sardina, caballa, etc.). Asimismo, la yema de huevo o determinados alimentos enriquecidos pueden ser una fuente de vitamina D.
Vitamina C
La vitamina C, conocida por su papel fundamental en la síntesis de colágeno, también es una de las vitaminas para fortalecer los dientes más importantes.
Y es que no solo es buena para los dientes, también lo es para las encías, puesto que fortalece el tejido conectivo de la boca. Bajos niveles de vitamina C se han asociado con problemas como el sangrado de encías, lo que puede traducirse en la aparición de enfermedades como la gingivitis y la piorrea.
Además, su acción antioxidante protege contra el estrés oxidativo y la inflamación crónica, condiciones que pueden afectar negativamente a la salud de las encías y, por consiguiente, la de los dientes.
Sin embargo, es importante consumir vitamina C con precaución. El ácido ascórbico que contiene puede tener un efecto erosivo en el esmalte dental si se expone de forma prolongada.
Para contrarrestar este efecto, se recomienda enjuagar la boca con agua después de tomar alimentos ricos en vitamina C y esperar un tiempo antes de cepillarse, para evitar daños en el esmalte debilitado.
Fuentes de vitamina C: esta vitamina se encuentra en verduras como el pimiento, el brócoli, las espinacas o los tomates y en frutas cítricas como la naranja, el pomelo, el limón, etc. También en otras frutas como el kiwi o la piña, entre otras.
Vitamina A
Se trata de otra de las vitaminas para fortalecer los dientes más importantes, ya que interviene en múltiples aspectos de la salud bucodental.
Por un lado, es fundamental para la mineralización del esmalte dental, ayudando a fortalecer los dientes y evitar enfermedades dentales tan comunes como la caries.
Por otro lado, la vitamina A estimula la producción de saliva, un fluido clave en la limpieza natural de la boca, al tiempo que mantiene las encías sanas y ayuda a una cicatrización más rápida.
Fuentes de vitamina A: la vitamina A se encuentra por norma general en los alimentos de color naranja como zanahorias, calabazas, albaricoques, batatas o mangos. Además, alimentos como las espinacas, los grelos, la yema de huevo o la leche, también son fuente de vitamina A.
Calcio
Por todo es sabido que el calcio es un elemento insustituible en la formación de huesos y dientes. No en vano, el 99% de este mineral se encuentra en huesos y dientes, por lo que ante una deficiencia, el cuerpo recurre a ellos para obtenerlo, poniendo en riesgo la salud oral y la salud ósea general.
Pero el calcio no solo proporciona solidez a los dientes, sino que también es indispensable para la regeneración de los tejidos blandos bucales y para mantener la estabilidad y soporte de los huesos mandibulares y maxilares.
Como ya hemos visto anteriormente, para asegurar una correcta absorción de calcio, es esencial la presencia de vitamina D, que se obtiene principalmente a través de la exposición solar.
Fuentes de calcio: aunque el primer alimento rico en calcio que viene a la mente son los lácteos, lo cierto es que hay otros que también tienen un alto porcentaje como el pescado azul, las legumbres, el marisco, la mayoría de frutos secos y algunas verduras como las acelgas, la col, las espinacas, etc.
Fósforo
En conjunción con el calcio, el fósforo es un mineral esencial que tiene un papel crucial en la salud dental. Y es que contribuye a la formación y mantenimiento del tejido óseo y dental, proporcionando la robustez y estructura necesarias para los dientes.
Además, la presencia de fósforo en la dieta es crucial para la remineralización del esmalte, un proceso natural que repara el esmalte dañado y refuerza los dientes contra futuros ataques ácidos.
Fuentes de fósforo: son alimentos ricos en este mineral la carne, el pescado, los huevos, los productos lácteos, los frutos secos como las nueces, las semillas de sésamo y ciertas legumbres como lentejas, frijoles rojos, guisantes, etc.
Otros nutrientes y vitaminas para los dientes que no pueden faltar en tu alimentación
Para mantener una dentadura fuerte y sana, no solo son fundamentales las anteriores vitaminas para los dientes. También cumplen un papel importante la vitamina K, crucial para la mineralización ósea y el fortalecimiento del esmalte, y la vitamina E, conocida por sus propiedades antioxidantes, lo que contribuye a la salud de las encías y la prevención de enfermedades periodontales.
El flúor, por su parte, es un mineral que refuerza el esmalte dental y tiene un efecto antibacteriano, lo que lo convierte en un excelente aliado contra la caries.
Estas vitaminas y elementos, junto con una higiene bucal adecuada y visitas regulares al dentista, son el pilar de una salud dental óptima.
Eso sí, es importante recordar que en la dieta, el equilibrio y la moderación son clave, puesto que el exceso de algunos de estos elementos, como el flúor, puede tener efectos adversos como la fluorosis dental.
