No cabe duda de que los implantes dentales son una opción efectiva y duradera para reemplazar los dientes perdidos o dañados.
Por un lado, son una solución estética perfecta para recuperar la sonrisa. Por otro lado, son una solución funcional que permite recuperar por completo la funcionalidad de la boca para masticar, hablar y reír sin problemas. Además, en la mayoría de casos suelen durar para toda la vida.
En BASTIDA Clínica Dental somos los creadores del Sistema FILO Implantology y podemos presumir de tener una dilatada experiencia en el mundo de la implantología.
Por eso hoy vamos a explicarte en detalle los distintos tipos de implantes dentales que existen, sus características y que cuidados requieren para asegurar una gran durabilidad. ¡Acompáñanos!
Contenido
¿Qué son los implantes dentales?
Los implantes dentales son pequeñas piezas fabricadas con materiales biocompatibles como el titanio o el circonio que se fijan al hueso de la mandíbula o del maxilar, actuando como raíces artificiales que después sostienen los nuevos dientes artificiales que pueden ser coronas o prótesis dentales.
Existen diferentes tipos de implantes dentales en función del número de piezas a reemplazar, el tamaño y la forma del implante, la técnica de colocación, etc. Tranquilo, porque en este artículo hablaremos de todos ellos.
Los implantes dentales ofrecen innumerables ventajas frente a otras alternativas de rehabilitación oral como las dentaduras postizas o los puentes fijos que, además de requerir más cuidados, no siempre se integran a la perfección a la boca.
Naturalmente, una de las grandes ventajas de los implantes es que mejoran la estética y la funcionalidad de la sonrisa, ya que permiten recuperar la forma, el tamaño y el color natural de los dientes, con la mejora de confianza y autoestima que ello conlleva.
Por otra parte, evitan la pérdida ósea y la reabsorción de la mandíbula, al estimular el crecimiento del hueso alrededor del implante. También preservan la salud de los dientes contiguos ya que no es necesario tallarlos ni desgastarlos para colocar prótesis.
Por último, no debemos olvidarnos de la enorme comodidad que proporcionan estas soluciones. A diferencia de las dentaduras postizas, no se mueven ni se desajustan. Y además, es mucho más sencillo mantenerlas y llevar a cabo una higiene bucal completa, ya que se pueden limpiar como los dientes naturales.
¿Cuándo es necesario un implante dental?
Ahora que sabemos qué es un implante dental, veremos cuáles son los casos en los que es necesaria esta intervención:
- Cuando se ha sufrido un fuerte traumatismo que haya provocado la rotura por completo de la pieza dental.
- Cuando un diente está afectado por enfermedades como caries o piorrea y no es posible reconstruirlo.
- Cuando alguna dolencia ha provocado la pérdida de una o varias piezas dentales.
- Cuando ya se ha perdido la pieza dental para evitar la reabsorción del hueso maxilar ya que dificultará la colocación de implantes en el futuro.
¿De que está compuesto un implante dental?
Un implante dental es una estructura compleja que consta de tres partes principales: el cuerpo, el pilar y la corona. A continuación, te explicamos en qué consiste cada una de ellas y qué función cumplen:
- Cuerpo: conocido coloquialmente como tornillo, se trata del implante propiamente dicho. Se inserta en el hueso y hace la función de raíz del diente y soporte para los componentes de la prótesis.
- Pilar: consiste en una pieza cuya función es unir el cuerpo del implante con la corona. Puede estar unido al tornillo de forma permanente o ser removible según el tipo de implantes dentales elegido.
- Corona: es la parte visible del implante que imita la forma y color naturales del diente original. Puede ser de diversos materiales resistentes aunque lo más habitual es que sean de porcelana.
¿Qué tipos de implantes dentales existen?
Ahora bien, no todos los implantes dentales son iguales ni se adaptan de igual forma a las particularidades de cada paciente.
Hoy en día existen diferentes tipos de implantes dentales que se pueden clasificar en base a diversos criterios, como la técnica de colocación, el material utilizado, el método de fijación o el número de piezas a reemplazar, entre otros.
A continuación, explicaremos las principales clases de implantes dentales que existen y cuáles son sus características, ventajas y desventajas.
Tipos de implantes dentales según la técnica de colocación
Dependiendo de la técnica que se utilice para fijar los implantes al hueso, podemos diferenciar básicamente entre dos tipos de implantes dentales: los implantes endoóseos y los implantes yuxtaóseos. Veamos todo sobre ellos.
Implantes endoóseos u osteointegrados
Los implantes endoóseos, también llamados implantes osteointegrados, son los más populares ya que se trata también de los más recomendados por los especialistas en implantología dental.
Como ya explicamos anteriormente se trata de pequeños tornillos de titanio u otros materiales biocompatibles que se insertan directamente en el hueso de la mandíbula o del maxilar mediante una sencilla y segura intervención quirúrgica.
En nuestro caso, que utilizamos el sistema FILO, esperamos aproximadamente 2 meses para el proceso de osteointegración, o lo que es lo mismo, la unión firme entre el hueso y el implante.
Es así como se logra una fijación fuerte y duradera que permite colocar más adelante las coronas o prótesis dentales definitivas sobre unos pilares o conectores que se fijan a los implantes con tornillos o cemento.
Este tipo de implantes dentales presentan grandes ventajas, motivo por el que son los más usados entre los profesionales de la implantología.
Una de ellas es que garantizan un alto porcentaje de éxito y una larga duración, además de permitir remplazar desde un solo diente hasta toda la dentadura. Además, este tipo de implantes dentales se adaptan a la forma y al tamaño del hueso, pues existen diferentes longitudes y diámetros de implantes.
También se integran con el resto de los tejidos orales, ya que son biocompatibles y no producen rechazo ni alergias. Por último, otra de sus grandes ventajas es que favorecen la preservación del hueso, al evitar su reabsorción y estimular su regeneración.
Sin embargo, estos implantes también tienen algunos inconvenientes que hay que tener en cuenta. El primero es que si no se tiene una cantidad y una calidad suficientes de hueso no será posible colocarlos. En tal caso, será necesario hacer un injerto óseo previo u optar por otros tipos de implantes dentales.
Finalmente, hay que señalar que son más costosos que otras opciones, ya que implican un proceso más complejo y unos materiales más sofisticados.
Implantes subperiósticos o yuxtaóseos
Aunque se encuentran en franco desuso, estos implantes todavía se utilizan en aquellas personas que no pueden colocar uno convencional por tener una altura ósea mínima, es decir, por no tener suficiente hueso.
Este tipo de implantes dentales se fijan mediante la cicatrización del tejido blando que los rodea, sin llegar a integrarse con el hueso.
Esto significa que no requieren de hueso para ser colocados pero a cambio resultan menos estables y duraderos que los implantes endoóseos, al no estar anclados al hueso, sino solo a la encía.
Tipos de implantes dentales en función de la localización
También según la localización donde se colocan, existen diferentes tipos de implantes dentales. Se trata de los siguientes.
Implantes cigomáticos
Son implantes largos que se anclan en el hueso cigomático, ubicado en el pómulo. Se trata de la elección de los implantólogos en caso de que el paciente tenga una atrofia severa del hueso maxilar y no sea posible colocar implantes convencionales o realizar injertos óseos.
Implantes pterigoideos
Se trata de implantes que se colocan en la zona posterior del maxilar superior, de forma inclinada para fijarlos en la apófisis pterigoides. Son la opción ideal cuando hay falta de hueso en la zona y se quiere evitar un injerto óseo o elevación de seno.
Implantes angulados
Para evitar las áreas anatómicas sensibles como el nervio dentario, el seno maxilar o la nariz, estos implantes se colocan con una inclinación respecto al eje vertical. Dicha angulación se compensa después con la utilización de pilares anatómicos.
Tipos de implantes dentales según el material utilizado
Según el material del que están hechos los implantes dentales, también podemos diferenciar entre dos tipos: los implantes de titanio y los implantes de circonio.
Implantes de titanio
Se trata de los más utilizados y populares hoy en día. El titanio es un metal ligero, resistente y con total biocompatibilidad que se integra perfectamente con el hueso sin causar rechazo ni alergias lo que se traduce en una tasa de éxito superior al 98%.
Implantes de zirconio
Estos son una alternativa más reciente y menos conocida que los anteriores. El circonio es un material cerámico también biocompatible que se fusiona con el hueso perfectamente. Este tipo de implantes dentales tienen la ventaja de ser blancos, lo que da lugar a un aspecto más natural que los de titanio.
Por contra, pueden ser más complejos de colocar y fracturarse ya que se trata de un material cerámico y no metálico. Además, son más caros que los de titanio y todavía no existen estudios suficientemente concluyentes sobre las tasas de éxito de los implantes de circonio.
Consejos para cuidar los implantes dentales
Cómo pasa con los dientes naturales, los implantes dentales también requieren de unos cuidados para mantener su funcionalidad y prevenir la llamada enfermedad periimplantaria.
En nuestro blog ya hemos hablado sobre cuestiones relacionadas como qué comer después de un implante dental y ahora también te daremos una serie de consejos para cuidar los implantes para que duren el mayor tiempo posible.
Naturalmente, los implantes dentales reclaman la misma higiene bucodental que los dientes naturales: cepillado diario de los dientes, uso de enjuagues bucales y uso de hilo dental o cepillos interdentales.
Además, también es muy aconsejable la utilización de un irrigador dental para eliminar partículas que queden en zonas de difícil acceso.
Por otra parte, es altamente recomendable no fumar y también evitar el consumo de alimentos ácidos y azucarados en pro de optimizar la duración del tratamiento.
Por supuesto, con este tipo de implantes dentales también es obligatorio seguir al dedillo el calendario de revisiones y limpiezas anuales programadas por los especialistas.
Conclusiones sobre los tipos de implantes dentales
Como has visto, existen diferentes tipos de implantes lo que facilita a los especialistas ofrecer una solución personalizada para cada paciente según sus características. Cada uno de ellos tiene sus ventajas e inconvenientes, por eso es tarea de los profesionales encontrar la solución más adecuada.
En nuestra clínica dental de Vigo contamos con el doctor Álvaro Bastida, creador del sistema FILO de implantes dentales y con una dilatada experiencia en el campo de la implantología oral que, junto a las últimas tecnologías y materiales de última generación, nos permite garantizar el éxito y la satisfacción en todos los tratamientos.
Así que si quieres unos implantes dentales seguros, duraderos y estéticos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros y solicitar una cita. Estaremos encantados de atenderte y ofrecerte una solución a medida para que recuperes tu sonrisa.